Matizar los brillos del rostro en 5 sencillos pasos
Matizar los brillos del rostro y conseguir una piel luminosa no tienen por qué ser contrarios. En este post hablaremos de cómo conseguir una piel hidratada y radiante eliminando los brillos y el exceso de sebo.
La producción de sebo es algo completamente normal y fundamental para asegurar la hidratación y protección de la piel frente a gérmenes externos. Aun así, podemos disimularlos siguiendo una rutina adaptada a tu tipo de piel.
Los brillos aparecen normalmente en la zona T del rostro por un exceso de grasa. Saber la causa principal por la que aparecen es fundamental para poder tratarlos de forma adecuada sin dañar la piel.
Generalmente, los motivos más frecuentes son los cambios hormonales, genética, o atravesar periodos de estrés o ansiedad. Todo esto, causa que las glándulas sebáceas produzcan más grasa de lo debido y aparezcan brillos.
La cosmética puede ayudarnos a matizar los brillos de la cara utilizando productos específicos para tratar la grasa y retrasar su aparición. Si quieres saber qué productos utilizar para conseguirlo, ¡sigue leyendo este post!
¿Cómo matizar los brillos?
En Marcel Cluny contamos con una amplia gama de productos con ingredientes de la mayor calidad para asegurar su seguridad y eficacia.
Lo más recomendable para pieles grasas o con tendencia acneica es utilizar cosméticos oil-free. Nuestra línea de productos específica para pieles mixtas y grasas no incluyen aceites en su formulación.
Realmente la función de los aceites no es la de hidratar, sino nutrir la piel en profundidad. La hidratación se consigue aumentando la humedad y esto se consigue con agua.
Los aceites crean una capa protectora en la piel que evita la pérdida de humedad y la entrada de agentes externos que dañen el cutis. Por tanto, deberemos incluir en nuestra rutina cosméticos que incluyan agua en su formulación para obtener los niveles de hidratación deseados sin obstruir los poros.
A continuación, te mostramos un ejemplo de rutina hidratante oil-free para pieles grasas, para conseguir una piel hidratada y sin brillos.
Rutina cosmética para pieles grasas o con tendencia acneica
El primer paso fundamental de la rutina es la limpieza. Repitiendo la acción dos veces al día (mañana y noche) es suficiente para eliminar restos de cosméticos y partículas como polvo, contaminación y polen, entre otros, que se acumulan en la superficie de nuestra piel y obstruyen los poros.
El gel limpiador exfoliante es una apuesta segura para este paso. Consigue eliminar en profundidad los residuos de la piel mientras elimina suavemente células inservibles que se acumulan en la superficie del rostro.
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En tu rutina de noche, puedes hacer un paso previo y utilizar el limpiador bifásico para eliminar todo rastro de maquillaje en ojos y labios. Utilizando después el agua micelar, conseguirás un rostro limpio en profundidad.
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Como segundo paso de la rutina, este tónico exfoliante refrescará tu piel completando el desmaquillado y fomentando la producción de células jóvenes.
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De 2 a 3 veces por semana aplica la mascarilla exfoliante para una limpieza de los poros más profunda mientras eliminas los restos de células que se acumulan en la piel.
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Como hidratante, una apuesta segura es la crema oil-free indicada especialmente para pieles grasas, con poros obstruidos y tendencia a la comedogenia. Hidrata en profundidad matificando la piel y eliminando los brillos del rostro al momento.
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Finaliza la rutina con la crema solar facial cada mañana para conseguir una piel hidratada, saludable, luminosa y sin brillos.
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