Cómo aplicar el colorete según la forma de tu cara
El colorete es, sin duda, un must have en nuestro neceser de maquillaje. Símbolo de la feminidad, la elegancia y la belleza, nos proporciona ese toque de dulzura que tanto puede favorecer a nuestro rostro. Este producto consigue realzar nuestras facciones y, si lo aplicamos correctamente, se muestra natural.
Los resultados son positivos siempre que sepamos cómo aplicarlo y es que, igual que el colorete puede realzar lo más saludable de nuestro rostro, también es capaz de hacer que éste parezca enfermizo o recargado. Si no estudiamos la estrategia adecuada, ¡puede pasar de ser un aliado a un enemigo en cuestiones de segundos! De la misma manera que con otros productos de maquillaje de cara, es vital conocer las características y propiedades de nuestro rostro (forma y tono) y también la aplicación idónea para nuestra cara.
En este post, daremos las claves para aplicar el colorete correctamente en función del corte de nuestra cara y del tono de nuestra piel.
Conoce cuál es la forma de tu cara
Tal como comentamos siempre, la cuestión clave para realizar un make up ideal es conocer nuestro rostro. Por esta razón, es importante no imitar a otras personas si no presentan nuestras mismas características faciales. Para evitar este error, lo primero que debemos tener claro es el corte de cara.
Diferenciaremos entre cuatro tipos de rostro: cara alargada, cara redondeada, cara cuadrada y cara ovalada.
Colorete en función de la forma de tu cara
Una vez tenemos claro cómo es nuestro rostro, podremos aplicar el colorete correctamente. A continuación, te dejamos los trucos para cada rostro:
Cara alargada
Para compensar la verticalidad del rostro, el colorete se debe aplicar en horizontal, de la mejilla a la oreja.
Cara redondeada
El colorete estilizará este tipo de rostro si lo aplicamos en diagonal creciente, siguiendo un dibujo de «C» o media luna. Para ello, partiremos desde la mejilla en dirección a la sien.
Cara cuadrada
Podemos compensar los marcados ángulos de este tipo de cara con un rubor centrado en las manzanas de las mejillas, que dulcifique la expresión.
Cara ovalada
La forma de aplicar el colorete en este caso será similar a la de la cara redonda, pero acentuando menos la inclinación de la media luna. El dibujo, por tanto, estaría en un término medio entre la cara redonda y la alargada.
Ciertamente, es conveniente seguir estas tácticas en función del corte de la cara de cada persona. No obstante, existe una norma genérica que debemos tener en cuenta. Podemos determinar que el colorete debe ir justo encima del contorno y debajo del iluminador o highlighter, coincidiendo exactamente con la estructura ósea del pómulo.
Colorete en función del color de tu piel
Tan importante es tener en cuenta la forma de tu cara como el color de ésta. Si tu piel es muy blanca, te favorecerán más los tonos melocotón. En cambio, si tu tono es blanco/medio estarás fabulosa con coloretes rosas. En caso de que tu piel sea de un tono medio, deberás decantarte por los rosas y naranjas con subtonos dorados. Si tu piel es media/morena, te sentarán genial los tonos rosas con subtonos marrones o fucsias. Finalmente, si eres de tez morena, te sentirás genial con marrones, dorados, naranjas y rosas oscuros.
Para la correcta aplicación del producto, debemos presionar el colorete con una brocha. Suaves toques, descargar el exceso de producto con la punta hacia arriba para que el polvo se reparta bien sobre el pelo. ¡Cuidado con la cantidad! Corregir el exceso de colorete es bastante difícil y si vas con prisas, será un desastre. Poco a poco, le irás cogiendo el truco y sabrás la cantidad, pero las primeras veces, ten cuidado.
La aplicación del colorete demanda un análisis de nuestro rostro. Podemos aprovechar este estudio de nosotras mismas para conocernos mejor (en todos los sentidos).
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